Respaldo de material de tanatología

Cigarrillo y embarazo

Cigarrillo y embarazo
Todos los bebés necesitan comenzar la vida sin cigarrillos
Lo que todos los padres deben saber
  Un comienzo de la vida sin cigarrillos es una de las mejores formas de proteger la salud, el desarrollo, el bienestar y la supervivencia del niño, tanto durante el embarazo como en el resto de la infancia

El humo del cigarrillo tiene más de cuatro mil componentes químicos dañinos para la salud que se desplazan por la sangre de las personas que fuman. Durante el embarazo, estos componentes atraviesan la placenta y alcanzan cada una de las células del muy vulnerable organismo del bebé. El daño es muy difícil de observar debido a que ocurre a nivel celular y no es visible ni con nuestros ojos ni con ecografías.
Efectos adversos del tabaco durante el embarazo
El cigarrillo interfiere con la función normal de la placenta, disminuyendo hasta en un 38 % la cantidad de sangre que pasa a través de la misma. El feto, entonces, se ve privado de nutrientes y de oxígeno, resultando así mal nutrido. Todos estos trastornos explican la causa por la cual, muchos hijos de madres fumadoras nacen con un peso más bajo que el normal. Además, las madres que fuman durante el embarazo presentan más posibilidades de:

    * Aborto espontáneo
    * Ruptura prematura de membranas
    * Recién nacido con peso menor a los 2.500 gramos
    * Recién nacido prematuro
    * Muerte inexplicable del feto durante el tercer trimestre

La nicotina interfiere en el desarrollo del feto, especialmente a nivel del sistema nervioso central. El resultado final es la pérdida y / o el daño de las células cerebrales. Si la madre fuma durante el embarazo, el hijo tiene concentraciones de nicotina, mayores que su propia madre, por lo que aún unos pocos cigarrillos diarios fumados por la madre pueden exponer al feto a elevadas concentraciones de nicotina.
Esto explicaría porqué los hijos de madres fumadoras muestran mayor incidencia de:
Al nacer:

    * Malformaciones como por ejemplo labio leporino y paladar ojival.
    * Signos de estrés y abstinencia
    * Mayores niveles de excitación e hipertonía
    * Los hijos de madres fumadoras requieren ruidos más fuertes para despertarse cuando están dormidos que los hijos de madres no fumadoras.

 
Durante los primeros meses de vida:

    * Triplica la incidencia del Síndrome de Muerte Súbita del Lactante.

En la segunda infancia:

    * A los siete años, los hijos de madres fumadoras, tienen menor talla en comparación con los hijos de madres no fumadoras.
    * Pobre rendimiento escolar.
    * Problemas de comportamiento.
    * Mayor incidencia de leucemia, cáncer de riñón y cáncer de los ganglios.

¿Qué les sucede a los niños pequeños cuando los adultos fuman cerca de ellos?

Respirar un aire viciado por el humo del cigarrillo deteriora la frágil vía aérea de los niños de menos de dos años de edad. Ocasiona daños en la boca, la nariz, los oídos, la garganta y los pulmones. El humo entra en el torrente sanguíneo y puede causar:

    * Mayor incidencia de catarros.
    * Otitis a repetición
    * Bronquitis
    * Asma
    * Neumonía
    * Internaciones en el hospital.

¿Qué es el “efecto dosis”?

El “efecto dosis” describe el vínculo que existe entre la exposición y el riesgo de padecer un trastorno. Cuanto más expuesto esté un bebé al cigarrillo, durante el embarazo y después de nacer, mayor es el riesgo. Ante una menor exposición, menor será también el riesgo.
Comenzar la vida lejos del cigarrillo es lo mejor. Sin embargo, cuando los padres reducen su hábito de fumar, aún sin abandonarlo por completo, disminuyen las posibilidades de que su niño se enferme. Asimismo, deben evitar fumar en el lugar donde está el bebé. Cuanto más puro es el aire que respira el bebé, tendrá menos posibilidades de enfermarse y crecerá más sano.
¿Qué impacto tiene el cigarrillo en la alimentación a pecho?

El humo del cigarrillo penetra en la leche materna y puede causar:

    * disminución de la bajada de la leche
    * reducción en la cantidad de leche
    * disminución en la concentración grasa de la leche
    * retraso en el crecimiento del bebé
    * abandono precoz de la lactancia

¿Qué pueden hacer los padres para modificar sus hábitos de fumar?

Algunas de las opciones para el cambio son:

    * No fumar durante el embarazo y no estar expuesta al humo del cigarrillo
    * Ambos padres luego del nacimiento del bebé deben tratar de dejar de fumar por completo.
    * No permitir a nadie fumar cerca del bebé
    * No fumar mientras se está amamantando al bebé
    * Si ambos padres, o alguno de ellos no puede dejar de fumar, debe hacerlo sólo en el exterior de la casa.

Disminuir o dejar de fumar durante el embarazo brinda una mayor protección

    * El bebé recibe sangre más oxigenada.
    * Las células tienen más posibilidades de un desarrollo normal.
    * El peso de nacimiento del bebé será adecuado
    * Mayor éxito en la lactancia.

Consulte con su obstetra y / o pediatra

GRANTAHI = Grupo Antitabáquico del Hospital Italiano
Departamento de Pediatría del Hospital Italiano de Buenos Aires
www.hospitalitaliano.org.ar

¿Qué es el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL)?

Qué es la muerte súbita

P: ¿Qué es el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL)?

R : El SMSL es el diagnóstico por la muerte de un bebé de menos de un año de edad, que no logra ser explicada luego de realizar una investigación minuciosa, en la que se incluyen autopsia, investigación de la escena en que ocurrió la muerte (según la guía del Centro Nacional de Epidemiología: Center for Disease Control and Prevention guidelines), y análisis de los síntomas y enfermedades que el niño pudo presentar antes de fallecer. Asimismo, se analizan otros aspectos de la historia médica del niño o de la familia que pudieran resultar de utilidad.

Como la mayoría de los casos se producen mientras el bebé duerme en su cuna, este tipo de muerte recibe a veces el nombre de ?muerte en cuna?. Pero hay que aclarar que la cuna no es la causa del SMSL. No obstante, otros aspectos relacionados con el sueño del bebé sí aumentan el riesgo del SMSL.

P: ¿Cuál es la causa del SMSL?

R : Existe una gran cantidad de evidencia científica que nos permite afirmar que los bebés fallecidos a causa del SMSL nacen con una anormalidad en su cerebro que los ubica en una situación de vulnerabilidad con respecto al SMSL. Varias investigaciones realizadas directamente en víctimas del SMSL revelan que estos bebés poseen una anormalidad en el ?núcleo arcuatum?, región del cerebro que controla la respiración, la frecuencia cardiaca, la termorregulación y los despertares durante el sueño. Asimismo, los bebés que nacen con otras anormalidades en su cerebro o en su cuerpo, también serían más vulnerables a una muerte súbita e inesperada. El origen de estas anormalidades podría ser la exposición del feto durante el embarazo a alguna sustancia tóxica o a la falta de algún elemento vital en el ambiente, como suficiente cantidad de oxígeno.

P: ¿Cuál es el período de mayor incidencia del SMSL?

R : El SMSL es la principal causa de muerte de bebés entre un mes y un año de edad. La mayoría de los casos se registra entre el segundo y el cuarto mes, y el 90% de las muertes se producen antes de los seis meses. Luego el riesgo comienza a disminuir.

P: ¿Podemos hacer algo para prevenir el SMSL?

R : En la actualidad, no existe forma de predecir qué bebés morirán a causa del SMSL. Sin embargo, los padres deben respetar un conjunto de recomendaciones que ayudarán a disminuir el riesgo y a que sus bebés puedan crecer de la forma más saludable.

    * Posición boca arriba para dormir : Acostar al bebé boca arriba para dormir es la medida más importante que deben implementar los padres y las personas que cuidan al niño para disminuir el riesgo del SMSL. Si el bebé se queda dormido boca abajo debe ser acostado boca arriba con suavidad. Las investigaciones señalan que en los países en los que se cambió la posición para acostar a dormir a los bebés (adoptando la posición boca arriba) la incidencia del SMSL disminuyó más del 50%. Cada año se salvan aproximadamente tres mil quinientos niños en Estados Unidos de América por respetar esta simple recomendación de cuidado infantil.

    * Ropa de cama: Los padres deben procurar que su bebé duerma sobre un colchón duro y firme ubicado dentro de una cuna que cumpla con las recomendaciones de seguridad. Las personas que cuidan al bebé también deben evitar colocar en el interior de la cuna elementos acolchados o mullidos como ropa de cama u otros objetos. No debe acostarse al bebé sobre almohadas, pieles de abrigo ni mantas. Es mejor utilizar una bolsa de dormir para bebé u otra vestimenta especial para dormir en lugar de sábanas. De esta manera, no es necesario agregar más abrigo. Si utiliza una sábana, los pies del bebé deben llegar al extremo de la cuna. La sábana debe ajustarse firmemente a ambos lados del colchón y cubrir sólo hasta la altura del pecho del bebé, para evitar que este pueda deslizarse y cubrir su rostro accidentalmente. Los bebés menores de un año de edad no deben ser acostados a dormir sobre camas de agua ni sofás; tampoco se los debe rodear de juguetes ni almohadas cuando duermen.

    * Rostro descubierto : Procura que el rostro del bebé quede descubierto mientras duerme. El riesgo del SMSL aumenta si el rostro del bebé queda cubierto. No utilices sábanas para proteger a tu bebé del sol o del frío, ni para evitar que se despierte por sonidos del exterior. El amontonamiento de ropa cerca del rostro del bebé puede obstruir la boca y la nariz, lo que podría causar la re inhalación de aire expirado.

    * Dormir en la misma cama o en un sofá con el bebé : Además de que en la cama de los adultos hay elementos peligrosos para la vida del bebé (almohadas, edredones, etc.) otro de los peligros asociados con esta práctica es que los adultos pueden caer en un sueño profundo, producto del cansancio o del consumo de alcohol o drogas, que les impida despertar si el bebé está en peligro. También es peligroso dormir en la cama con el bebé si los padres son fumadores.

      También existen peligros si el bebé duerme en la misma cama con hermanos u otros familiares.

      Los sofás y las sillas son lugares muy peligrosos para acostar a dormir a un bebé.

      No se ha demostrado que el colecho (dormir en la cama con el bebé) pueda ser un factor protector contra el SMSL. Sin embargo, la co-habitación podría ser un factor protector: colocar la cuna del bebé junto a la cama de los adultos proporciona al niño una sensación de seguridad y cercanía con sus padres. Además, esta práctica facilita la lactancia materna.

    * Tabaquismo : Las madres que fuman durante el embarazo triplican el riesgo de que su bebé pueda morir a causa del SMSL. Asimismo, si el padre o la madre fuman después de nacer el bebé y exponen al niño a estas sustancias tóxicas duplican su riesgo. Los padres deben procurar un ambiente sin humo de cigarrillo para el bebé. Las investigaciones demostraron que el índice del SMSL aumenta con cada persona que fuma en la casa, con cada cigarrillo fumado y con la exposición del bebé al humo del cigarrillo. Las sustancias tóxicas presentes en el cigarrillo interfieren negativamente en el desarrollo de los pulmones y el sistema nervioso del bebé, y limitan la capacidad del niño de despertarse durante el sueño.

    * Temperatura de la habitación : Los bebés deben estar a una temperatura cálida pero no demasiado calurosa. Si el bebé está abrigado en exceso le resultará muy difícil despertarse del sueño profundo. La temperatura de la habitación del bebé debe ser agradable para una persona adulta y el niño no debe estar demasiado abrigado.

    * Cuidados durante el embarazo : Los cuidados durante el embarazo (alimentación adecuada, abstinencia de consumir bebidas alcohólicas, drogas, cigarrillos), así como los controles médicos frecuentes (desde el inicio del embarazo), ayudan al bebé a crecer sano y a prevenir el desarrollo de una anormalidad que lo exponga a una muerte súbita.

    * Controles pediátricos frecuentes : Los padres deben llevar al bebé al pediatra para sus controles de rutina. Además, deben respetar el calendario de vacunación.

    * Personas dedicadas al cuidado infantil: Cuando un bebé duerme habitualmente boca arriba y es acostado boca abajo por una persona bien intencionada pero mal informada, el riesgo del SMSL aumenta notablemente. Procura transmitir las recomendaciones de la ?Campaña bebés boca arriba? a todas las personas que cuidan al bebé (niñeras, abuelos, personas dedicadas al cuidado infantil). No todas las personas están al tanto de estas importantes recomendaciones, por lo tanto, es necesario informar acerca de ellas.

P: ¿Qué es la ?Campaña bebés boca arriba?

R: La ?Campaña bebés boca arriba? recibe este nombre porque su principal recomendación es acostar a los bebés a dormir boca arriba con el objetivo de disminuir el riesgo del SMSL. El Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano (NICHD : National Institute of child Health and Human Development) conduce esta campaña junto con la Oficina de Salud Materno Infantil (Maternal and Child Health Bureau), junto con otros organismos federales como el Centro Nacional de Epidemiología (Center for Disease Control) y la Oficina de Censos (Census Bureau).

La Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics) es el principal financista de la campaña, junto con First Candle/SIDS Alliance y la asociación ?Association of SIDS and Infant Mortality Programs?. Según la recomendación que emitiera la Academia Americana de Pediatría en el año 1992, la Campaña fue lanzada en el año 1994 con el objetivo de llevar esta información a todas las salas de recién nacidos del país. Se destinó una línea telefónica gratuita para solicitar folletos, posters y videos de la ?Campaña bebés boca arriba?.

P: ¿Ha tenido éxito la ?Campaña bebés boca arriba?

R: La campaña ha tenido muchísimo éxito ya que el mensaje llegó efectivamente a los padres y a quienes cuidan niños. Se ha producido un cambio notable: en el año 1992 el 70% de los bebés dormía boca abajo; mientras que en el 2002 sólo el 15% dormía en esta posición. La incidencia del SMSL disminuyó más del 50% entre los años 1994 y 2002. Se trata de la disminución más importante del SMSL registrada en Estados Unidos de América.

P: ¿Existe algún grupo de bebés más vulnerables al SMSL?

R: Sí, los niños que se enumeran a continuación están en mayor riesgo de sufrir el SMSL:

    * Los hijos de madres que durante su primer embarazo tenían menos de veinte años
    * Los hijos de madres que no realizaron los adecuados controles prenatales
    * Los hijos de madres que quedaron embarazadas nuevamente en un lapso muy breve de tiempo
    * Los bebés prematuros y aquellos que presentaron bajo peso al nacer, así como los bebés de nacimientos múltiples (mellizos, trillizos, etc.)
    * Los hijos de madres que fumaron durante el embarazo o después de nacer el bebé
    * Los bebés que son acostados a dormir boca abajo

P: ¿Existe algún grupo étnico más vulnerable al SMSL?

R: Los bebés de poblaciones Afro Americanas poseen un riesgo dos veces y medio mayor de morir a causa del SMSL en comparación a los niños de raza blanca. Los niños de poblaciones aborígenes de Estados Unidos de América poseen un riesgo tres veces mayor. La ?Campaña bebés boca arriba? se ha ampliado con el objetivo de acercar el mensaje a estas culturas, con la ayuda de grupos comunitarios, cívicos y religiosos.

P: El SMSL ¿es hereditario?

R: Podría existir una característica que predisponga genéticamente a un bebé al SMSL. A veces, algunos trastornos metabólicos (hereditarios en algunos casos) se han confundido con el SMSL. Uno de estos trastornos, conocido como deficiencia de acylCoA deshidrogenada de cadena media (medium chain acylCoA dehydrogenase deficiency), impide que el niño pueda procesar los ácidos grasos. Una acumulación de estos metabolitos ácidos podría ocasionar una interrupción rápida y fatal de la respiración y de la función cardiaca. Si en la familia existe una historia médica de este tipo de trastorno, o si se ha producido alguna muerte inexplicable (especialmente más de un caso) debe realizarse a los padres del bebé un estudio genético por medio de un análisis de sangre para determinar si son portadores de este trastorno. Si uno de los padres o ambos son portadores, el bebé deberá ser analizado después de nacer (estudio de muy bajo costo). Por esta razón, la autopsia adquiere una importancia fundamental. Los tejidos del niño pueden ser analizados para detectar trastornos metabólicos conocidos.

P: Creo haber escuchado que la posición de costado es un factor protector contra el SMSL

R: En el año 1992, la Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics) recomendaba las posiciones boca arriba o de costado para acostar a dormir a los bebés con el objetivo de disminuir la incidencia del SMSL. Sin embargo, en el año 1996, luego de haber analizado muchas investigaciones, concluyeron que la posición más segura para acostar a dormir a los bebés es boca arriba. Las investigaciones señalaban que el riesgo del SMSL es mayor si los bebés duermen de costado, porque en esta posición es más fácil para el bebé girar hacia la posición boca abajo.

P: Mi bebé ¿no se atragantará si vomita o regurgita mientras duerme boca arriba?

R: Muchos padres acuestan a sus bebés boca abajo porque temen que estos puedan atragantarse si vomitan o regurgitan mientras duermen. Sin embargo, en los países que recientemente adoptaron la posición boca arriba se han realizado muchas investigaciones al respecto. Estas investigaciones concluyeron que la posición boca arriba no aumenta la incidencia de aspiración, neumonía, atragantamiento y otros trastornos. Asimismo, la AAP ha analizado la literatura médica relativa a este tema y no ha encontrado relación entre la posición boca arriba para acostar a dormir a los bebés y el riesgo de atragantamiento.

P: ¿Qué bebés no deben dormir boca arriba?

R: En algunos casos los médicos recomiendan que determinados niños duerman boca abajo si padecen ciertos trastornos como reflujo gastroesofágico o determinadas patologías de la vía aérea superior que podrían predisponerlos a un atragantamiento o a problemas respiratorios si duermen boca arriba. Si los padres están inseguros acerca de la posición en que debe dormir su bebé, deben conversar acerca de este tema con el médico del niño u otro profesional.

P: La posición boca arriba para dormir ¿no achata la cabeza del bebé?

R: Ciertos estudios sugieren que la posición boca arriba podría aumentar la incidencia de plagiocefalia o ?cabeza chata? en el bebé. Sin embargo, se trata de una característica benigna que desaparece por sí sola cuando el niño comienza a sentarse. Esta característica puede revertirse simplemente con girar la cabeza del bebé alternando diferentes posiciones para que no apoye siempre sobre el mismo lado (por ejemplo, una semana hacia la derecha, otra semana hacia la izquierda). También se puede rotar la ubicación del bebé en la cuna, para que pueda observar la actividad exterior (por ejemplo, la puerta de la habitación).

P: ¿Debe acostarse a los bebés boca abajo en algún momento?

R: Se recomiendan los momentos de juego boca abajo mientras el bebé está despierto y es supervisado por una persona adulta. Estos momentos de juego boca abajo contribuyen a fortalecer los músculos de la parte superior de su cuerpo y el desarrollo motriz. Además, los momentos de juego boca abajo disminuyen las áreas chatas en la parte posterior de la cabeza del bebé (?cabeza chata? o plagiocefalia).

P: ¿Qué debo hacer si mi bebé llora constantemente en posición boca arriba?

R: Los bebés manifiestan una preferencia a determinada posición desde que nacen hasta los 4-6 meses de edad. Si desde el día que nacen son acostados boca arriba, ellos finalmente aceptarán esta posición y se acostumbrarán a ella.

P: El chupete ¿puede actuar como un mecanismo protector contra el SMSL?

R: Se han realizado pocas investigaciones relativas a los potenciales efectos del chupete en el SMSL. Aparentemente, la utilización del chupete podría disminuir el riesgo del SMSL. Existen muchas teorías al respecto. Se ha sugerido que la presencia de un chupete en la boca del niño evita que éste gire hacia la posición boca abajo mientras duerme. El movimiento haría salir el chupete de la boca, razón por la cual el lactante preferiría permanecer boca arriba. Otra investigación sugiere que el chupete ayudaría a que la lengua quedara hacia atrás, lo que mantiene abierta la vía aérea. También se sugirió que el chupete tranquiliza al bebé, evitando en él momentos de irritación y ansiedad en la cuna. Además, el chupete podría estimular los músculos de la vía aérea superior y la producción de saliva, desencadenando actividad cerebral y la capacidad de despertar del sueño. Los bebés que habitualmente utilizan chupete poseen una mayor aptitud para despertar del sueño, aún si no lo utilizan en ese momento.

Hasta que las investigaciones no demuestren fehacientemente una relación entre la utilización del chupete y la disminución del riesgo del SMSL, la ?Campaña bebés boca arriba? no emitirá una recomendación al respecto.

P: ¿Deben utilizarse dispositivos para mantener determinada posición del niño en la cuna?

R: La AAP no recomienda la utilización de dispositivos de este tipo ya que su seguridad no ha sido comprobada y no han demostrado disminuir el riesgo del SMSL.

P: ¿Existe alguna ventaja por dormir junto al bebé?

R: Algunas investigaciones científicas demostraron que cuando la madre duerme en la cama con el bebé (colecho), podría alterarse el patrón del sueño de ambos. Estas investigaciones originaron, por parte de los medios de comunicación no especializados, la especulación de que el colecho podría disminuir el riesgo del SMSL. Si bien el colecho posee ciertos beneficios (facilita la lactancia materna), no existe evidencia de que pueda disminuir la incidencia del SMSL. Por el contrario, varias investigaciones afirman que el colecho, en determinadas circunstancias, podría aumentar el riesgo del SMSL. En la actualidad no hay fundamentos para recomendar el colecho como estrategia contra el SMSL.

No obstante, se puede proteger al bebé contra el SMSL si se ubica su cuna al lado de la cama de los adultos (co-habitación).

P: ¿Se han realizado investigaciones para determinar la causa del SMSL?

R: Los científicos están investigando el desarrollo y las funciones del sistema nervioso, el cerebro, el corazón, los patrones de la respiración y el sueño, el balance de los químicos en el organismo, los descubrimientos resultantes de las autopsias y los factores ambientales. El SMSL, como muchos otros trastornos médicos, podría tener más de una causa , y más de una forma de prevención. Esta podría ser la razón por la cual los niños fallecidos a causa del SMSL son tan diversos entre sí. La investigación del SMSL ha sido una de las prioridades del ?Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano? (NICHD: National Institute of Child Health and Human Development) del ?Instituto Nacional de Salud? (NIH: National Institutes of Health). Si bien la incidencia del SMSL está disminuyendo, es importante que el NICHD continúe investigando acerca de las causas, de los grupos de riesgo, y de las forma de disminuir la incidencia. Además de los programas de promoción que garantizan la financiación por parte del estado de las investigaciones del SMSL patrocinadas por el NICHD, First Candle/SIDSS Alliance realiza su propio programa de investigación a nivel nacional.

Los titulares periodísticos enfatizan en la importancia de hallar las causas del SMSL. Cuanto más conozcamos acerca del SMSL, mejor podremos distinguirlo de otros tipos de muerte. De esta forma, podremos algún día determinar qué niños poseen un riesgo mayor de morir a causa del SMSL.

P: ¿Se han realizado investigaciones acerca del monitor domiciliario?

R: Entre las diferentes investigaciones del NICHD, el monitoreo domiciliario ocupó un lugar importante. Durante la década del 70´ y a comienzos de los 80´, se creía que el monitor domiciliario podía identificar qué niños estaban en mayor riesgo de sufrir el SMSL, al poder señalar aquellos episodios de aparente amenaza a la vida, antecesores del SMSL.

Durante septiembre del año 1996, el NICHD realizó una conferencia llamada ?Las apneas del lactante y el monitor domiciliario? (Infantile Apnea and Home Monitoring). Luego de analizar todas las investigaciones realizadas, el panel de expertos emitió un consenso que establecía que ?el monitor cardio-respiratorio sólo es efectivo en determinados casos para tratar las apneas. Sin embargo, en el caso de un recién nacido sano, los riesgos, desventajas y costos del monitoreo domiciliario superan la supuesta capacidad del monitor para detectar al lactante en riesgo de sufrir el SMSL?.

En la actualidad, el NICHD financia una investigación realizada por varios centros y llamada CHIME (Collaborative Home infant Monitoring Evaluation). Esta investigación, iniciada en el año 1991, utiliza un monitor especial con capacidades múltiples: mayor memoria, aptitud para detectar apneas centrales y obstructivas, medición continua de la saturación de oxígeno en sangre y evaluación de la posición en que duerme el lactante.

El proyecto CHIME creará una gran base de datos (a disposición de toda la comunidad científica) acerca del desarrollo de la fisiología cardio-respiratoria de los bebés normales y de los lactantes en riesgo. En este contexto, la investigación producirá nuevos puntos de vista acerca de la frecuencia y la naturaleza de los episodios clínicamente significativos en relación al patrón respiratorio, a la frecuencia cardiaca y a la saturación de oxígeno.

P: Entonces, el NICHD ¿no recomienda la utilización del monitor domiciliario para prevenir el SMSL?

R: A pesar de que determinados monitores domiciliarios emiten una alarma cuando el bebé deja de respirar, no existe evidencia de que el monitor pueda prevenir el SMSL. Además, el monitor posee muchas desventajas: falsas alarmas frecuentes, restricción en la movilidad del niño y de sus padres, riesgo de que otros niños pequeños sufran un golpe eléctrico.

Un panel de especialistas convocados por el NIH recomendó que no se utilice el monitor para aquellos niños que no poseen un riesgo de muerte súbita e inesperada. Sin embargo, el monitor podría recomendarse para determinados casos: lactantes que sufrieron uno o más episodios de interrupción de su respiración y requirieron reanimación o estimulación, bebés prematuros con apneas sintomáticas, o si el lactante sufre un trastorno médico como hipoventilación central.

En caso de utilizarse un monitor, los padres deben saber cómo usarlo y cuidarlo. También deben conocer la técnica de reanimación cardio pulmonar si el monitor emite una alarma.

P: ¿Se han difundido historias de diagnósticos equivocados recientemente en los medios de comunicación?

R: Las investigaciones indican que un pequeño porcentaje de casos que originariamente se atribuyeron al SMSL eran en realidad producto de un trastorno metabólico. Otros informes señalan que algunos casos atribuidos al SMSL podrían en realidad ser casos de hemorragia en los pulmones (hemosiderosis pulmonar).

P: ¿Existe algún calculo acerca de la cantidad de casos en que se diagnoticó por error el SMSL?

R: Algunos estudios señalan que es muy pequeño el porcentaje de casos en que se diagnosticó erróneamente el SMSL. En una declaración emitida en el año 1994, la AAP señaló que el diagnóstico del SMSL fue correcto en un 95% de un 98% de los casos.

P: Recientemente, los medios de comunicación difundieron algunos casos en los que, en un primer momento, se había diagnosticado el SMSL, pero que en realidad eran producto de abuso infantil

R: Si bien los casos de abuso infantil mal diagnosticado como SMSL adquieren notoriedad en los medios de comunicación, es más frecuente que se acuse injustamente a los padres víctimas del SMSL de un posible accionar ilícito. Según su definición, el SMSL es un diagnóstico al que se llega al no poder encontrar otras causas de muerte, y luego de haber realizado una exhaustiva investigación (autopsia, investigación de la escena en que ocurrió la muerte y análisis de la historia médica del bebé). Muchos de los casos que enfatizan los medios de comunicación sucedieron hace décadas, cuando todavía no se había implementado un procedimiento para la realización de la autopsia y la investigación de la escena de fallecimiento. Si bien han ocurrido casos en que el forense no pudo detectar la verdadera causa de muerte, la cantidad enorme de casos de SMSL es real y continúa siendo en la actualidad un enigma médico luego de haber eliminado las posible causas de muerte, incluyendo el abuso infantil.

Todos estos casos nos recuerdan que es necesario continuar investigando cada muerte súbita e inesperada en forma individual. Deben considerarse toda las causas posibles de muerte además del SMSL, entre ellas las anormalidades congénitas, lo trastornos metabólicos, las lesiones provocadas involuntariamente, el abuso infantil y las infecciones.

P: ¿Existe alguna legislación a nivel estatal o nacional para investigar los casos de muerte súbita del lactante?

R: En el año 1993, el panel de especialistas ?Interagency Panel on SIDS? se reunió con el objetivo de emitir una normativa acerca de la investigación de lo casos de muerte súbita e inexplicable del lactante. Es esencial realizar la investigación de la escena en que ocurrió la muerte, con el objetivo de eliminar otras posibles causas de fallecimiento: accidental, ambiental, no natural. Asimismo, esta investigación permitirá a los especialistas reunir información acerca de los factores de riesgo del SMSL. En el mes de junio del año 1996, el panel publicó una guía para la investigación de la escena de muerte que incluía un protocolo modelo y un formulario de recopilación de datos por parte de los forenses, los jueces de instrucción, los investigadores y los agentes de policía. A pesar de que la legislación estatal y regional señala qué casos deben investigarse y durante cuánto tiempo, esta guía establece un modelo uniforme para la investigación de la escena de muerte en todo el país.

En la actualidad, aproximadamente la mitad de los estados del país poseen una legislación obligatoria relativa a la realización de la autopsia en caso de muerte súbita del lactante. En la mayoría de lo caso, esta legislación incluye la idea de brindar una ayuda solidaria a las familias en proceso de duelo por el fallecimiento de un niño a causa del SMSL. Las familias víctimas del SMSL han encabezado los esfuerzos, junto con First Candle/SIDS Alliance, en la búsqueda de financiación, en la investigación y en la adopción de legislación obligatorias para las autopsias. Asimismo, han luchado para procurar que la realización de la investigación de la escena de muerte fuera minuciosa pero solidaria con los sentimientos de la familia.

Una legislación relativa a la realización de la autopsia y a la investigación de la escena de muerte es crucial para diferenciar los casos de SMSL de los casos de abuso infantil, y para ampliar nuestros conocimientos acerca del SMSL.

P: ¿Cómo afecta a la familia una muerte a causa del SMSL?

R: Una muerte a causa del SMSL es una tragedia que desencadena un conjunto de reacciones emocionales intensas entre los integrantes de la familia. Luego de que comienzan a disiparse las sensaciones iniciales de aturdimiento, negación y descreimiento, sobreviene una depresión profunda en los padres del bebé. Esta depresión puede afectar el sueño, la alimentación, la capacidad de concentración y la energía en general. El llanto y el sollozo, el hablar constantemente del tema, los sentimientos de culpa y enojo constituyen reacciones normales durante el proceso de duelo.

Muchos padres experimentan temores infundadosde que ellos o algún integrante de la familia sufrirá una tragedia. Es normal sobre proteger a los demás hijos y sentir temor por lo hijos futuros. Los padres comienzan a recuperarse cuando asumen que el bebé ya no está. En ese momento, comienzan a tomar una función más activa en sus vidas, y ésta comienza a tener sentido otra vez. El dolor por el hijo fallecido pierde intensidad, aunque nunca desaparecerá por completo. Determinados acontecimientos importantes como cumpleaños, fiestas especiales, el aniversario de fallecimiento del bebé, desencadenan periodos de dolor y sufrimiento intenso.

Los niños también sufren cuando muere un hermano. Con frecuencia temen morir ellos también o que otro integrante de la familia pueda morir en forma súbita. Los niños se sienten culpables por la muerte del hermano, porque creen que con su accionar pudieron haber contribuido a esta muerte. Los niños no demuestran sus sentimientos de forma evidente. Pueden negar sentirse turbados o tristes pero manifestar sus emociones de diversos modos: excesivo apego a los padres, mala conducta, incontinencia nocturna, dificultades en la escuela y pesadillas. Es importante dialogar con los niños acerca de la muerte y explicarles que el bebé murió a causa de un problema médico que sólo le sucede a los bebés y en casos excepcionales.

P: ¿Existen grupos de apoyo para las familias que perdieron un bebé a causa del SMSL?

R: Las familias son estimuladas para que busquen asesoramiento y apoyo. First Candle/SIDS Alliance brinda asistencia en situaciones críticas tanto en idioma inglés como en español. Asimismo, posee una línea telefónica donde se proporciona información acerca de otros grupos de ayuda: 800-221-7437

Citado y adaptado por First Candle/SIDS Alliance ? Enero 2004 – Material redactado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano (NICHD National institute of Child Health and Human Development)

El duelo en niños, adolescentes y jóvenes

El duelo en niños, adolescentes y jóvenes

El dolor por la pérdida de un ser querido se siente a cualquier edad, también en la infancia.

La mayoría de los adultos no saben cómo actuar para ayudar a sus hijos o niños/as y jóvenes a su cargo y a veces equivocadamente, padres y adultos suelen evitar mostrar sus sentimientos.

Hablan poco o nada del tema sin darse cuenta de que con su comportamiento enseñan a los niños/as a actuar igualmente, por lo que acallarán también sus sentimientos.

Quizá la vida moderna, más material y superficial, ha ido provocando que emociones y realidades de la vida como la enfermedad, la muerte y todo lo que le rodea, sea alejado del entorno familiar y haya ido desviándose hacia hospitales y tanatorios, más ?asépticos y prácticos?.

A la falta de ?formación? se une la educación recibida en cuanto a no exteriorizar los sentimientos ni las emociones -sobre todo a los varones: ?los chicos no lloran? … ?hay que ser fuertes

Cuando los adultos tienen que enfrentarse a la difícil tarea de explicar a un niño/a que una persona cercana ha fallecido, a veces optan por decirle que se fue de viaje, de vacaciones, que está dormido, o simplemente determinar que: ?es mejor no decirle nada?… ?ya se lo diremos cuando vaya siendo mayor? ?

Ese temor a hablar de los sentimientos ocurre incluso en situaciones más ?llevaderas? aunque también traumáticas para un niño/a, por ejemplo ante la muerte de su mascota.

Por no saber qué hacer o decir, o no enfrentarse a lo duro de la situación, los mayores pueden decidir una rápida solución: comprar otro animalito; en vez de hablar de lo sucedido y de cómo se siente el niño/a por ello.

Los niño/as y adolescentes están creciendo a cada instante tanto física, como mental, emocional y espiritualmente, lo que les ayudará a ir comprendiendo poco a poco lo que representa la muerte.

La ayuda de sus mayores -padres, familia, profesores- será primordial, puesto que una pérdida muy cercana en la infancia o primera juventud, conllevará un gran trabajo emocional por parte del niño/a.

Es frecuente que los niño/as que ya entienden lo sucedido, pero que aún son demasiado pequeños, pospongan inconscientemente ese ?trabajo? y lo elaboren en la adolescencia o de adultos.Probablemente el suceso marcará su vida, aunque esto no quiere decir que vaya a producirle un problema grave (patología).

Habrá que tener muy en cuenta además de la edad del niño, su comprensión de conceptos.

No se debe temer porque se noten ciertos cambios en su carácter como baja autoestima, timidez, ensimismamiento y aislamiento, euforia?. ya que suelen ser más o menos pasajeros y no son demasiado graves.

Puede ocurrir un cierto estancamiento en su madurez, pero la pérdida de un ser querido puede hacerles desarrollar un profundo concepto y sentido de la Vida, lo que les ayudará a evolucionar psíquica y emocionalmente con una mayor riqueza. Algo que muchos adultos no llegan a alcanzar aún en una larga vida.

Noción de la muerte en la infancia

El concepto de muerte-vida es mínimo en la primera infancia. Los niños/as muy pequeños no saben siquiera diferenciar entre ellos mismos y los demás, lo vivo y lo muerto, lo animado y lo inanimado.

De los dos a los tres primeros años toman mayor conciencia de sí mismo y los más cercanos en su entorno, padre, hermanos, etc.

Hacia los 4 a 5 años, comienzan a usar términos como: vida, vivir, estar vivo, muerte o morir.

Van diferenciando lo vivo (personas, animales) de lo que no lo está (juguetes, objetos). Aún así no son conscientes de la posibilidad de la muerte ni del concepto en sí.

La idea sobre la muerte varia según el entorno, tradición, costumbres, religión y sobre todo la madurez del niño/a.

En la infancia y adolescencia, se percibe el mundo egocéntricamente. La realidad cambia según el propio pensamiento y personalidad, y suele corresponderse con la edad psicológica o ?edad mental?.

Hay niños/as pequeños muy maduros, mientras que otros más mayores son aún muy infantiles. Su imaginación infantil puede hacerles creer por ejemplo, que la muerte es como cuando uno se duerme y se despertará después.

Es el tiempo de ir conociendo cuentos y películas con final feliz y en los que nadie muere aunque exista cierta violencia

Así su pensamiento imaginativo les hace difícil saber lo que ha ocurrido realmente si alguien cercano fallece.

Hacia los ocho o nueve años suelen pensar que juguetes, dibujos, piedras, tienen ?vida? y que la muerte es algo pasajero.

El concepto de tiempo también tiene una medida distinta; mañana, pasado mañana o para siempre, se mezclan entre realidad y fantasía.

Aún así el sentimiento de separación y soledad que les produce la pérdida, les hace mantener un sentimiento doloroso de abandono.

Durante tiempo, el mínimo pensamiento de que la muerte sea algo real provocará su rechazo hasta sacarlo fuera de su realidad.

El duelo de los niños/as será proporcional a la intensidad de la relación que tuviera con el fallecido.

Durante la infancia es primordial sentirse protegido, si sienten que han perdido esa protección a causa del fallecimiento de la persona querida, le producirá inestabilidad emocional y sentimientos de rabia y miedo.

Los niños/as pueden vivir la pérdida con un gran sentimiento de culpa. Pueden creer que el/ella mismo/a provocó el mal.

Ya sea porque se enfadaran tiempo atrás con el fallecido, por creer que no se portó bien con o porque fue desobediente.

No se debe olvidar que los niños/as tienen sus propios recursos para luchar contra la tristeza que la pérdida les produce, como su mentalidad de fantasía.

La relativa inmadurez emocional y psicológica también les servirá de escudo y ayuda para reducir el grado de angustia.
Comprensión según su edad

La edad física no se ajusta a veces con la edad mental que es en realidad la que cuenta.

Interviene también de forma importante en su grado de madurez la educación recibida y el entorno familiar y social.

Antes de los cuatro o cinco años es muy normal que no tengan noción de la muerte. Quizá podría hablarse de una cierta alteración emocional por la ausencia de la madre ?si es ella la fallecida- también por el padre.

Entre los cinco y los nueve años pueden aparecer miedos, ya que al no poder identificar la realidad pueden creer que la muerte es alguien, una persona o una especie de ?monstruo? que puede venir en cualquier momento a hacerle daño, a llevarle de su casa y separarle del entorno seguro en que se encuentra.

Hasta los nueve o diez años perciben la muerte como algo malo que le pasa a las personas y por deducción pueden llegar a pensar que eso mismo también les puede pasar a ellos.

Hacia los diez a doce años -en la pre-adolescencia- considera la vida más desde el punto de vista del exterior. Comienzan a ser muy importantes los amigos, los compañeros del colegio y personas de un círculo más exterior al del núcleo familiar ?profesores, familiares más lejanos, etc.-

La muerte adquiere una connotación emocional mucho más intensa y se inician en el conocimiento y la práctica de costumbres sociales, culturales y religiosas a las que pertenecen, lo que les puede ayudar a elaborar su duelo.

La fantasía e imaginación ocupan menos espacio en su pensamiento, pasando a un razonamiento más material y realista.

Mantienen aún la creencia de que la muerte no es algo inexorable y que las causas de que ésta se produzca son ?ajenas? y fuera de su entorno. Es algo que ?les pasa a otros? y por cosas tan extraordinarias como guerras, explosiones, accidentes, disparos o enfermedades de personas mayores ?infartos, embolias, etc.

Sin embargo ya comienzan a temer que sus seres queridos puedan fallecer y se inician en una aceptación más profunda de que todos los seres vivos morirán algún día, eso sí, muy muy lejano. Aún no tienen conciencia de que el suceso se pueda producir en la actualidad.

A esta edad muchos niños/as sienten cierta curiosidad por saber y ver qué ocurre después de la muerte. Hablan a menudo de fantasmas, aparecidos y elucubran sobre qué se sentirá después y qué habrá más allá, interviniendo bastante creencias religiosas o morales aprehendidas durante la infancia
Consejos para ayudar a un niño en su duelo

Los adultos tienden a apartar a los niños/as y jóvenes de cualquier cosa que crean les pueda inquietar.

En el caso del fallecimiento de un ser querido muy cercano para el niño/a, es un error apartarles del suceso pues se quiera o no ellos están afectados.

Evitar que participen en el duelo familiar, es apartarles de una situación muy importante, no solo para su vida actual, sino para la futura.

No se debe olvidar que es muy importante para un ser humano aprender a afrontar y aceptar situaciones y sentimientos más o menos negativos y adversos.

Los niños/as y jóvenes también necesitan saber lo que está pasando, y que alguien les ofrezca explicaciones adecuadas a su nivel de entendimiento.

Los mayores deben reconocer que ellos también han sufrido su pérdida y ¡es imposible evitarles el dolor que sienten.¡

En vez de ocultar y evitar la triste realidad por la que cada miembro de la familia está pasando, es más beneficioso unirse y apoyar al niño/a o joven para enfrentarse a su propio duelo de la forma más natural posible.

En el caso que un familiar cercano se encuentra ingresado en un hospital o clínica por una enfermedad muy grave, la mayoría de los niños/as no suelen ir a visitar a su ser querido. Es frecuente que nunca vuelvan a ver a su familiar, ya se trate del padre, la madre, algún hermano o los abuelos. Esto le aparta de una realidad que desgraciadamente va a vivir después. La lejanía del asunto le hará más difícil creer lo que ha pasado.

Es muy importante para la aceptación de la pérdida, visitar a su familiar enfermo -siempre que sea posible y tanto enfermo como niño/a den su permiso-. Se le estará ayudando a ?elaborar su duelo? y a admitir mejor la realidad y a despejar las posibles dudas del por qué de su marcha.

Con demasiada frecuencia las personas mueren en soledad. El miedo al dolor paraliza y hace preferir estar apartado.

Así se actúa también con los niños/as, se justifica pensando: ?es mejor que sea así…?. Quizá solo es el deseo de no vivir esa experiencia que produce tanto malestar.

Esta forma de actuar tiene mucho que ver con las costumbres de la familia, así como a la esfera social y religiosa a la que pertenezca.

La cultura, los ritos y la religión son importantes, y participar en ellos ayudará a niños/as en la elaboración de su propio duelo, sobre todo si ya están en la adolescencia.

No obstante, en el funeral, cortejo, sepelio, etc., deben estar orientados por alguien de confianza y que conteste a sus preguntas, incluso que vaya anticipándole los acontecimientos de las costumbres y celebraciones.

Es necesario tener en cuenta el deseo del niño/a en cuanto a si quiere participar o no en dichos actos, dándole toda libertad a su elección para que ni sienta obligación a asistir ni, por el contrario, apartado de los mismos.

No se le debe sobreproteger ni aislar de todo lo que vaya sucediendo a su alrededor ni del cambio que la pérdida haya podido producir en la familia.

No hay que olvidar, para no angustiarse, que el niño/a o adolescente, igual que los adultos, tardará cierto tiempo en procesar su duelo durante el que irá enfrentándose paso a paso con su dolor.

Si en este proceso se siente acompañado de alguien que le guíe, con el que se sienta protegido y apoyado, hará que el niño/a vaya encontrando la forma de enfrentarse sanamente a su dolor y a aceptar la pérdida de la forma menos traumática posible.
Informarles directamente

Si sabemos que el suceso puede ocurrir en cualquier momento, por ejemplo ante una enfermedad grave muy avanzada, es muy importante preparar al niño/a para el desenlace. Sobre todo si se trata de alguien tan cercano como uno de los padres o un hermano.

Debe evitarse mantener la muerte en secreto ya que el niño/a observará la tristeza y la conducta afligida de los adultos que aumentaría su confusión al mezclar realidad con fantasía.

Al fallecer uno de los padres, casi siempre el otro progenitor dice a los hijos lo ocurrido. La mayoría de las veces lo hace pronto, pero en algunos casos no, y se da la noticia después de semanas o meses.

El riesgo que se corre al ocultar el suceso es que, o bien ya lo han intuido por sí solos, o lo que es peor, les ha llegado por comentarios de personas ajenas. Esto puede provocar una reacción negativa hacia la situación y hacia sus mayores.

El niño/a tiene derecho de ir preparándose para el desenlace si éste es previsible, y tanto en ese caso como en el de un fallecimiento repentino, tiene así mismo todo el derecho a ser informado cuanto antes por alguien allegado y de confianza, no por un extraño.

La persona que de la noticia debe prepararse para soportar, si sucede, el estallido de rabia o de llanto, ya que puede ocurrir que el niño/a reaccione gritando, llorando, dando patadas o rompiendo objetos, también profiriendo insultos o palabras malsonantes.

Lo mejor es adoptar una actitud de firmeza y serenidad, atentos para evitar que se pueda hacer daño, sin ningún reproche por su posible reacción violenta y que note en todo momento la compañía, el abrazo y consuelo de quien le ha dado la noticia

Una actitud de espera o de evadir la verdad diciéndoles por ejemplo, que la persona fallecida se ha ido de viaje o está en el hospital, no hará más que aumentar el dolor.

Puede que más pronto que tarde, al descubrir la verdad, el niño/a se sienta defraudado/a y engañado/a por la persona en la que tenía toda su confianza.
Dialogar sobre la muerte

Hablar sobre la muerte ayudará a que el niño/a la vaya conceptuando como algo natural y facilitará que se abra la puerta de una comunicación sincera.

Es muy importante fomentar la comunicación, sólo así se podrá saber lo que siente y le costará menos iniciar el diálogo cuando le sea difícil expresar su dolor.

El niño/a aprenderá que es bueno preguntar y además servirá para eliminar falsas realidades e interpretaciones de su imaginación. Esto le ayudará para comprender la realidad de lo que está pasándole a él/ella y a su familia.

Permitir que haga todas las preguntas que quiera e incluso si no las hiciese, insistir prudentemente para que las haga, contestándole correspondiendo a su edad y madurez.

Se puede aprovechar al ver alguna película que tenga algo que ver con el tema, sobre todo si participa en ella algún un niño/a o joven.

Es importante elegir bien las palabras para aclararles sus dudas, por ejemplo al preguntarnos sobre lo que ocurre después de la muerte.

Usar palabras claras y francas, sin olvidar, en caso de que este tema sea comentado, que conceptos como la vida tras la muerte (?el más allá?, ?el otro lado?) son difíciles de comprender antes de los diez u once años.
Ser sinceros

El niño/a, adolescente o joven necesita de alguna persona que le ofrezca toda atención, seguridad, cariño y afecto, pero ante todo en situaciones de pérdida de un ser querido necesita que sean completamente sinceros con él/ella, por lo que se le debe decir la verdad con claridad para no confundirles.

Se pueden contar narraciones que ayuden para comparar lo que está pasando y que sean coherentes con las creencias y filosofías de la familia.

Pude ocurrir que se empleen ?mentiras piadosas? y se les diga por ejemplo, que la persona fallecida ?está como durmiendo?.

Esto les confunde, pues aunque no sean muy pequeños no entienden algo que por un lado oyen:?ha muerto? y por otro: ?está dormido?.

Es peligroso, pues irse a dormir puede convertirse en algo amenazador que le produzca animadversión y miedo.

En éste supuesto, la falta de sinceridad solo hará que el niño/a, al saber la verdad tenga una gran decepción, pérdida de confianza y temor hacia los adultos, en particular a quien le dijo aquello ¡pues se siente engañado por alguien en quien confiaba¡

Niño/a, adolescente o joven, lo que necesita es expresar sus emociones, temores e inquietudes. Para ello precisa como nunca de un adulto capaz de escucharle y que le sepa explicar sinceramente y con simples palabras qué es lo que ha ocurrido y por qué.
Contestar sus preguntas y explicar sus dudas

Al responder a sus preguntas es importante que los adultos digan cosas de acuerdo con sus creencias.

Si no fuese así el niño/a acabará descubriendo las discrepancias y se pondrá en peligro la relación a causa de la desconfianza generada.

En caso de que el fallecimiento corresponda a otro niño/a o persona muy joven de la familia, debemos intentar que vaya asumiendo que la muerte no atiende a edades, y que aunque lo más corriente es que fallezcan primero las personas mayores, a veces también mueren los más jóvenes, incluso los niños/as pequeños.

Insistir que es normal llorar, sentirse afligido y sentir tristeza o pena por no tener más a la persona querida.

A veces los niños/as ven algún pájaro o insecto muerto, lo que puede hacerle preguntar sobre la muerte.

Es importante responder de forma adecuada a sus preguntas para que puedan ir formando una idea apropiada sobre el tema, dándoles la respuesta más conveniente a su comprensión, edad y madurez.

Observando las cuestiones de sus preguntas, la persona que cuide del niño podrá darse cuenta del estado de ánimo del niño/a y del momento en que se encuentra en su duelo.

Por ejemplo si preguntan: ?¿y dónde está ahora??, deberá decirse la verdad; que su cuerpo ya no está vivo, lo que quiere decir que ya no habla, no se mueve, no ve ni oye, etc. y que por todo ello no puede estar a nuestro lado. Se debe incidir en que la persona fallecida no va a regresar.

Y si desea saber dónde está su cuerpo, contestarle según se haya procedido en los actos funerarios.
Contestar sus dudas sobre asuntos religiosos

Las explicaciones dadas a un niño/a o adolescente, deben estar de acuerdo con la creencia religiosa familiar.

Si el niño/a está acostumbrado a oír conceptos como ?cielo? -si se encuentra en el seno de una familia creyente- y se le dice que su ser querido ?esta en el cielo? puede aceptar más fácilmente ese concepto, pero si no lo ha oído o la familia no es creyente, sentirá que hay algo incongruente entre lo que sus mayores creen y lo que le dicen.

Se le puede hablar de un Dios que se lleva a la persona a ese cielo, pero estas historias o explicaciones a veces, aunque consuelan en cierta medida a los adultos, en los niños/as puede no servir mucho. Incluso puede ocasionarles cierto temor y creer que ese Dios puede quitarle a sus seres queridos, a los que ve sufrir por aquello de lo que tanto hablan de haberse ?ido al cielo?.

Otra manera de decirle a los niños que la persona ha fallecido, sobre todo si se trata de un hermano o de otro niño, es dándoles la descripción de que ahora es como un?angelito? que vuela hacia el cielo.

Este concepto puede no ser entendido por el niño/a y llegue a creer que el hermano/a está ?volando? y se presentará en cualquier momento, lo que le puede hacer alejarse de la realidad y confundirle con su pensamiento fantasioso.

Los Ninos y la Pena por la Muerte de un ser Querido

Los Ninos y la Pena por la Muerte de un ser Querido No. 8

No. 8 (Revisado 7/04)

Cuando un miembro de la familia muere, los niños reaccionan de manera diferente a los adultos. Los niños de edad pre-escolar creen que la muerte es temporera y reversible, esta creencia está reforzada por los personajes en dibujos animados que se mueren y reviven otra vez. Los niños de entre cinco y nueve años comienzan a pensar más como los adultos acerca de la muerte, pero todavía no pueden imaginarse que ellos o alguien que ellos conocen pueda morir.

A la conmoción y a la confusión que sufre el niño que ha perdido su hermanito, hermanita, papá o mamá se le añade la falta de atención adecuada de otros familiares que lloran esa misma muerte y que no pueden asumir adecuadamente la responsabilidad normal de cuidar al niño.

Los padres deben de estar conscientes de cuáles son las reacciones normales de los niños ante la muerte de un familiar, así como de las señales que indican que el niño está teniendo dificultad enfrentándose a la pena. Es normal que durante las semanas siguientes a la muerte algunos niños sientan una tristeza profunda o que persistan en creer que el familiar querido continúa vivo. Sin embargo, la negación a largo plazo a admitir que la muerte ocurrió, o el evitar las demostraciones de tristeza, no es saludable y puede resultar en problemas más severos en el futuro.

No se debe obligar a un niño asustado a ir al velorio o al entierro de un ser querido; sin embargo, el honrar o recordar a la persona de alguna manera, como por ejemplo, encender una velita, decir plegarias, preparar un álbum de recortes, revisar las fotografías o el contar una historia, puede ser de mucha ayuda. A los niños se les debe de permitir el expresar su pérdida y pena como ellos crean.

Una vez que el niño acepta la muerte, es normal que manifieste su tristeza de vez en cuando a través de un largo período de tiempo, a veces en momentos inesperados. Sus parientes sobrevivientes deben de pasar todo el tiempo posible con el niño y hacerle saber bien claro que tiene permiso para manifestar sus sentimientos libre y abiertamente.

Si la persona muerta era esencial para la estabilidad del mundo del niño, la ira es una reacción natural. Esta ira se puede manifestar en juegos violentos, pesadillas, irritabilidad o en una variedad de otros comportamientos. A menudo el niño mostrará enojo hacia los miembros sobrevivientes de la familia.

Después de la muerte de un padre o una madre, muchos niños actuarán como si tuviesen menor edad. El niño temporeramente actúa de manera más infantil exigiendo comida, atención, cariño y habla como un bebé. Los niños más pequeños frecuentemente creen que ellos son la causa de lo que sucede a su alrededor. El pequeño puede creer que su papá, abuelito, hermano o hermana se murió porque él una vez cuando tenía coraje deseó que se muriera. El niño se siente culpable porque cree que su deseo se”realizó?.

Los niños con problemas serios de pena y de pérdida pueden mostrar una o más de las siguientes señales:

    * un período prolongado de depresión durante el cual el niño pierde interés en sus actividades y eventos diarios
    * insomnio, pérdida del apetito o el miedo prolongado a estar solo
    * regresión a una edad más temprana por un período extendido de tiempo
    * imitación excesiva de la persona muerta
    * decir frecuentemente que quisiera irse con la persona muerta
    * aislamiento de sus amiguitos
    * deterioro pronunciado en los estudios o el negarse a ir a la escuela

Si estos síntomas persisten, puede que se necesite ayuda profesional. Un siquiatra de niños y adolescentes u otro profesional de la salud mental capacitado puede ayudar al niño a aceptar la muerte y asistir a los sobrevivientes para que ayuden al niño durante el proceso de pena y luto.

Partos en los que los niños nacen muertos, abortos naturales muertes infantiles

Partos en los que los niños nacen muertos, abortos naturales muertes infantiles

La muerte de un bebé es una de las experiencias más dolorosas y traumáticas que puedan sufrir los padres en toda una vida. Y aunque no haya nada que pueda quitar el dolor que se siente en el momento de tal pérdida, podría resultar de ayuda saber que otras familias se han encontrado en situaciones similares o que han encontrado consuelo mientras luchaban con la profunda congoja que sigue después de la muerte de un niño.

Es importante darse el espacio y el tiempo necesario para tratar la congoja. Llorar la muerte de un bebé puede tardar más tiempo del que uno pueda pensar. Con frecuencia, la gente alrededor de Uds. puede sentirse muy incómoda por las intensas emociones y angustia que estén sufriendo. Tengan paciencia consigo mismos porque lleva tiempo sentir un cierto alivio.

No importa la edad, su niño ha sido y sigue siendo parte de Ud. Cuando murió su bebé, también murieron muchas esperanzas y sueños del futuro. El tener que escoger un nombre y al mismo tiempo el hecho de tener que pasar por un funeral puede asegurar que Uds. son padres y tienen el derecho de llorar la pérdida de su niño durante todo el tiempo y tan intensamente cuanto sea necesario.

Síntomas de la congoja

Cuando un bebé muere, los síntomas normales de congoja pueden ser variados como también las reacciones de los padres y la intensidad de emociones. Algunas de las reacciones típicas a la congoja incluyen las siguientes:

– El llorar, la soledad, el sentimiento de aislamiento.

– Una necesidad de tener que hablar de la muerte y sobre los detalles de lo que pasó.

– Los sentimientos de falta de esperanza, vulnerabilidad y depresión.

– El enojo, la culpabilidad propia y la de otros.

– La pérdida de apetito, el comer demasiado, el insomnio, la irritabilidad.

– La inhabilidad de concentración, de comprensión o de recuerdo

– La pérdida de metas y objetivos en la vida, una sensación de desolación respecto al futuro.

La congoja puede durar bastante más de lo que uno pueda esperar y habrá muchos altibajos en el proceso. El primer año puede ser muy difícil, especialmente cuando los padres se hacen preguntas dolorosas y se atormentan a sí mismos con declaraciones como las siguientes:

– ¿Por qué ha sucedido esto a mi bebé, mi hijo/a?

– ¿Cómo es que yo no supe que algo iba mal?

– ¿Por qué no fui antes al doctor?

– ¡Todo es mi culpa!

– Si solamente…

Probablemente no hay respuestas adecuadas a estas preguntas que puedan servir de consuelo. El enojo y el sentimiento de culpabilidad propia usualmente van acompañados con la congoja. Traten de compartir y expresar estos sentimientos como una forma de liberación de éstos. Hablar de éstos eventualmente llevará a que se perdonen Uds. y a otros a quienes hayan culpado de la pérdida.

El impacto de la congoja en el matrimonio

Los matrimonios o parejas luchan de diferentes mane- ras para combatir la congoja. Muy a menudo, hay malentendidos entre las parejas en casos así causados por las consecuencias de la congoja. A veces las parejas dudan en expresar sus sentimientos de tristeza cuando uno de ellos ha tenido “un buen día” o viceversa. Otras parejas no van a querer hablar de la muerte pero siguen sintiéndose cómodos en el hecho de que uno de los dos necesite desahogarse al respecto.

El llorar es otra área donde las parejas van a actuar de diferentes maneras. De hecho, el llorar es una expresión de congoja aceptable y sana, pero para muchos padres (al contrario de las madres) es difícil aceptar que la liberación de tensión a través de lágrimas sea buena. Los padres en muchos casos tienen tendencia a sentir la necesidad- y son animados por otros- de ser fuertes, cuando el llorar les sería de ayuda en combatir la congoja.

El sentir congoja y llorar la pérdida de un ser querido es emocional, física y mentalmente muy agotador y estresante. Es importante que las parejas no dejen de comunicarse aunque sea difícil para no crear malentendidos y para que las emociones fuertes creadas de esta angustia no lleven el matrimonio a problemas.

También es importante darse cuenta de estas diferencias y no darse la culpa el uno al otro o asumir que a uno u otro no le importe la situación y no esté sufriendo. Es más bien una diferencia en la habilidad de poder expresar emociones fuertes, en vez de tratar de herir a la otra pareja a propósito. Continúen a compartir sus emociones y recuerden que las expresiones hacia afuera de congoja indican por la mayor parte sólo un aspecto de lo que la persona realmente está sintiendo.

Los maridos y las esposas reaccionarán de diferentes maneras ante las relaciones íntimas también. Mientras que un miembro de la pareja necesite y busque la proximidad y la convicción de que no todo ha cambiado, el otro miembro de la pareja puede tomar la sugerencia de tener relaciones íntimas como un afrontamiento, sin entender como es posible que alguien pueda pensar en tener relaciones íntimas cuando un bebé ha muerto. Reconozca que estas reacciones son normales. Con el tiempo y la paciencia, la mayoría de parejas reestablecen una relación íntima cuando ambos están listos.

Es importante que las parejas entiendan que de hecho no hay ninguna solución, agenda o receta fácil para una rápida recuperación de estos problemas. Su relación puede resultar incómoda mientras hacen frente a combatir estas emociones y sentimientos intensos.

Hacer frente a la familia y los amigos

Los amigos, la familia y los colegas de trabajo pueden sentirse incómodos alrededor de Ud. Es muy probable que ellos no entiendan la intensidad de la congoja que siente o se sientan indefensos en poder consolar y confortarle. Consecuentemente, en varias ocasiones la gente alrededor de Ud. tratará de consolarle con expresiones como las siguientes:

– Tendrá más hijos.

– Tuvo suerte de que sucedió temprano en el embarazo.

– Aún es lo suficientemente joven para tener más hijos.

– Tuvo suerte de no haber traído al niño del hospital a casa.

Estas declaraciones duelen, pero no hay mucho que Ud. pueda decir o hacer ante estas situaciones donde la gente quiere consolarle y ayudarle con intenciones sinceras. Como éstos no han sufrido una experiencia del mismo tipo, es difícil para ellos entender hasta qué punto e intensidad Ud. realmente siente su congoja y tristeza. Otra manera en la que la familia y los amigos tratan de confortar es sugiriendo que tenga otro bebé.

En tal caso, haga saber a su familia y a sus amigos lo importante que este bebé era para Ud. y pídales que muestren su apoyo a través de poder escucharles en su pena.

Futuros embarazos

La decisión de tener o no tener otro bebé es suya y de su pareja. No hay un momento “apropiado” de espera después de la recuperación de la madre. De hecho, no importa qué decisión haga respecto a un embarazo o una adopción después de la pérdida de su niño. No cambiará el tiempo de duración de la congoja que siente por el bebé que ha muerto. Cuando planee otro embarazo, tenga en cuenta que aparte del estrés físico otros embarazos pueden causar dificultades emocionales.

Hermanos supervivientes

Los hermanos/as jóvenes supervivientes de una pérdida de este tipo, también sienten congoja y pueden ser pasados por alto en la necesidad de consuelo y apoyo por “ser demasiado jóvenes para entender” la situación. Es necesario animarles a que también expresen sus sentimientos sobre la pérdida de su hermanito/a. También ayudaría que su/s hijo/s compartieran sus sentimientos con otros niños que han perdido sus hermanos en situaciones similares.

Preguntas sobre creencias religiosas

La muerte de su bebé puede poner en duda sus creencias religiosas o su filosofía de vida. Durante un tiempo es posible que sienta que la vida no tiene sentido y es injusta y que no queda razón por la cual vivir. Parte de su enojo probablemente sea dirigido a la fuente de su fe o creencia religiosa, y necesite tiempo para volver a reafirmarla. Un sentido de propósito y control volverá a ser parte de su vida, pero es un proceso gradual y no hay límite de tiempo. Para muchos, por otra parte, la fe en su religión, provee apoyo y en muchos casos ayuda a los padres a aceptar lo no aceptable.

Sugerencias que pueden ayudar

Las fotografías y otros recuerdos tienden a ayudar a los padres a sobrepasar la congoja. Los padres que por otra parte hayan sentido una pérdida a través de un aborto natural o muerte infantil tendrán pocos recuerdos que sirvan de consuelo. En estas situaciones, varios padres crean memorias haciendo un libro de recuerdos del bebé o una caja especial que contenga la documentación del hospital, certificados, tarjetas de pésame, fotos y mantitas. Tómese el tiempo para hablar con otras parejas que hayan experimentado una pérdida similar. El hecho de compartir el dolor y la situación con estos otros padres en un ambiente de aceptación y comprensión, puede facilitar la soledad e aislamiento de la congoja. Los que “han vivido tal experiencia” realmente pueden entender y aceptar su angustia. 

Nacidos muertos, abortos naturales y muertes infantiles?entendiendo la congoja

    Nacidos muertos, abortos naturales y

muertes infantiles?
entendiendo la congoja 

La muerte de un bebé es una de las experiencias más dolorosas y traumáticas que puedan sufrir unos padres en toda una vida. Aunque no haya nada que pueda quitar el dolor que se siente en el momento de tal pérdida, podría resultar de ayuda saber que otras familias se han encontrado en situaciones similares o que han encontrado consuelo mientras luchaban con la profunda congoja que sigue después de la muerte de un niño.

Es importante darse el espacio y el tiempo necesario para tratar la congoja.  Llorar la muerte de un bebé puede tardar más tiempo del que uno pueda pensar.  Con frecuencia, la gente al su alrededor puede sentirse muy incómoda por las intensas emociones y angustia que esté sufriendo.  Tenga paciencia consigo mismo/a porque lleva tiempo sentir un cierto alivio.

No importa la edad, su niño ha sido y sigue siendo parte de Ud.  Cuando murió su bebé, también murieron muchas esperanzas y sueños del futuro.  El tener que escoger un nombre y al mismo tiempo el hecho de tener que pasar por un funeral puede asegurar que Ud es un padre o una madre quienes  tienen el derecho de llorar la pérdida de su niño durante todo el tiempo y tan intensamente cuanto sea necesario.

Síntomas de la congoja

Cuando un bebé muere, los síntomas normales de congoja pueden ser variados como también las reacciones de los padres y la intensidad de emociones.  Algunas de las reacciones típicas a la congoja incluyen las siguientes:

    *

      ·  El llorar, la soledad, el sentimiento de aislamiento.
    *

      ·  Una necesidad de tener que hablar de la muerte y sobre los detalles de lo que pasó.
    *

      ·  Los sentimientos de falta de esperanza, vulnerabilidad y depresión.
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      ·  El enojo, la culpabilidad propia y la de otros.
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      ·  La pérdida de apetito, el comer demasiado, el insomnio, la irritabilidad.
    *

      ·  La inhabilidad de concentración, de comprensión o de recuerdo
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      ·  La pérdida de metas y objetivos en la vida, una sensación de desolación respecto  al futuro.

La congoja puede durar bastante más de lo que uno pueda esperar y habrá muchos altibajos en el proceso.  El primer año puede ser especialmente difícil sobre todo si los padres se atormentan con preguntas  dolorosas y declaraciones como las siguientes:

    *

      ·  ¿Por qué ha sucedido esto a mi bebé, mi hijo/a?
    *

      ·  ¿Cómo es que yo no supe que algo iba mal?
    *

      ·  ¿Por qué no fui antes al doctor?
    *

      ·  ¡Todo es mi culpa!
    *

      ·  Si solamente…

No hay respuestas adecuadas a estas preguntas que puedan servir de consuelo.  El enojo y el sentimiento de culpabilidad propia usualmente van acompañados con la congoja.  Trate de compartir y expresar estos sentimientos como una forma de liberación de éstos.

El impacto de la congoja en el matrimonio

La reacción a la muerte de un bebé es tan individual como la persona que la está sufriendo.  Los matrimonios o parejas luchan de diferentes maneras para combatir la congoja.  Muy a menudo, hay malentendidos entre las parejas causados por las consecuencias de la congoja.  A veces las parejas dudan en expresar sus sentimientos de tristeza cuando uno de ellos ha tenido ?un buen día? o viceversa.  Otras parejas no van a querer hablar de la muerte pero siguen sintiéndose cómodos en el hecho de que uno de los dos necesite desahogarse al respecto.

El llorar es otra área donde las parejas van a actuar de diferentes maneras.  De hecho, el llorar es una expresión de congoja aceptable y sana, pero para muchos padres (al contrario de las madres) es difícil aceptar que la liberación de tensión a través de lágrimas sea buena.  Los padres en muchos casos tienen tendencia a sentir la necesidad- y son animados por otros- de ser fuertes, cuando el llorar les sería de ayuda en combatir la congoja.

Muchos padres creen que al no llorar tienen que ser ?fuertes? para los demás miembros de la familia, pero lo único que consiguen es parar una reacción normal.  Las lágrimas son un homenaje al hijo que ha muerto y al mismo tiempo un alivio muy sano.

La congoja es emocional, física y mentalmente muy agotadora y estresante, y no deja energía para nada más, incluso la comunicación entre la pareja.  Aún si la congoja une a las parejas más, sigue siendo importante mantener la relación entre ellos.  Tiene que entender que la vinculación de cada padre y el bebé puede ser a nivel diferente causando así congoja de diversas intensidades.  Comparta sus emociones mientras tenga en cuenta que las emociones expresadas abiertamente sólo son una indicación de parte de lo que la persona realmente está sintiendo interiormente.

Los maridos y las esposas reaccionarán de diferentes maneras ante las relaciones íntimas también.  Mientras que un miembro de la pareja necesite y busque la proximidad y la convicción de que no todo ha cambiado, el otro miembro de la pareja puede tomar la sugerencia de tener relaciones íntimas como un afrontamiento, sin entender como es posible que alguien pueda pensar en tener relaciones íntimas cuando un bebé ha muerto.  Reconozca que estas reacciones son normales.  Con el tiempo y la paciencia, la mayoría de parejas reestablecen una relación íntima cuando ambos están listos.

Es importante que las parejas entiendan que de hecho no hay ninguna solución, agenda o receta fácil para una rápida recuperación de estos problemas.  Su rela-ción puede resultar incómoda mientras hacen frente a combatir estas emociones y sentimientos intensos.

Hacer frente a la familia y los amigos

Los amigos, la familia y los colegas de trabajo pueden sentirse incómodos alrededor de Ud.  Es muy probable que ellos no entiendan la intensidad de la congoja que siente o se sientan indefensos en poder consolar y confortarle.  Consecuentemente, en varias ocasiones la gente alrededor de Ud. tratará de consolarle con expresiones como las siguientes:

·  Tendrá más hijos.

·  Tuvo suerte de que sucedió temprano en el embarazo.

·  Aún es lo suficientemente joven para tener más hijos.

·  Tuvo suerte de no haber traído al niño del hospital a casa.

Estas declaraciones son dolorosas, pero no hay mucho que Ud. pueda hacer o decir a esta gente de buenas intenciones.  Como éstos no han sufrido una experiencia del mismo tipo, es difícil para ellos entender hasta qué punto e intensidad Ud. realmente siente su congoja y tristeza.  Otra manera en la que la familia y los amigos tratan de confortar es sugiriendo que tenga otro bebé.  En tal caso, haga saber a su familia y a sus amigos lo importante que este bebé era para Ud. y pídales que muestren su apoyo a través de poder escucharles en su pena.

Futuros embarazos

La decisión de tener o no tener otro bebé es suya y de su pareja.  No hay un tiempo ?indicado? de espera.

No importa qué decisión haga respecto a un embarazo o una adopción después de la pérdida de su niño. No cambiará el tiempo de duración de la congoja que siente por el bebé que ha muerto.  Cuando planee otro embarazo, tenga en cuenta que aparte del estrés físico otros embarazos pueden ser emocionalmente difíciles.

Hermanos supervivientes

Los hermanos/as jóvenes supervivientes de una pérdida de este tipo también sienten congoja.  Anime a que éstos también expresen sus sentimientos sobre la pérdida de su hermanito/a.  También ayudaría que su/s hijo/s compartieran sus sentimientos con otros jóvenes de su edad los cuales también han sufrido la pérdida de un hermano/a.  Hay material de lectura que puede ser de gran ayuda.

Preguntas sobre creencias religiosas

La muerte de su bebé puede poner en duda sus creencias religiosas o su filosofía de vida.  Durante un tiempo es posible que sienta que la vida no tiene sentido y es injusta y que no queda razón por la cual vivir.  Parte de su enojo probablemente sea dirigido a la fuente de su fe o creencia religiosa, y necesite tiempo para volver a reafirmarla.  Un sentido de propósito y control volverá a ser parte de su vida, pero es un proceso gradual y no hay límite de tiempo.  Para muchos, por otra parte, la fe en su religión, provee apoyo y en muchos casos ayuda a los padres a aceptar lo no aceptable.

Sugerencias que pueden ayudar

Las fotografías y otros recuerdos tienden a ayudar a los padres a sobrepasar la congoja.  Los padres que por otra parte hayan sufrido una pérdida a través de un aborto natural o muerte infantil tendrán pocos de éstos.  Muchos padres crean memorias haciendo un libro de recuerdos del bebé o una caja especial que contenga la documentación del hospital, certificados, tarjetas de pésame, fotos y mantitas.

Tome tiempo para hablar con otros padres que hayan sufrido una pérdida similar.  Compartir el dolor y la situación con estos otros padres en un ambiente de aprobación y comprensión, puede facilitar la soledad e aislamiento de la congoja.  Los que ?han pasado tales penurias? realmente pueden entender y aceptar su angustia.  Estos padres pueden ayudarle a entender que los aspectos más dolorosos de la congoja pasarán con el tiempo y que no está solo.

la eutanasia para mascotas

Quizás la acción más bondadosa que usted puede hacer por una mascota que está sumamente enferma o severamente herida y que nunca podrá reasumir una vida de buena calidad es hacer que su Médico Veterinario le induzca su muerte tranquila y humanamente a través de la eutanasia. Estar de acuerdo que a su mascota se le haga la eutanasia es una decisión muy seria que usted tiene que tomar, y raramente es fácil de hacer.

¿Qué debo hacer?

Su relación con su mascota es especial, y usted es responsable por el cuidado y bienestar de ella. Finalmente, muchos dueños se enfrentan con tomar la decisión de vida-o-muerte para sus mascotas. Tal decisión puede ser necesaria para el bienestar de su familia y de su mascota.

Una decisión acerca de la eutanasia de su mascota puede ser una de las decisiones más difíciles que usted alguna vez debe tomar. Aunque sea una decisión personal, no necesita ser una decisión solitaria. Su Médico Veterinario, sus familiares y amigos íntimos pueden ayudarle a tomar la decisión correcta. No sólo considere lo que es mejor para su mascota, pero también lo que es mejor para usted y su familia. La calidad de vida es igualmente importante para ambas las mascotas y las personas.

¿Cómo sabré cuándo?

Si su mascota ya no puede experimentar más las cosas que disfrutaba, no puede responder a usted en su manera usual, o parece estar experimentando más dolor que gozo, usted puede considerar la eutanasia. Igualmente, si su mascota sufre de una enfermedad terminal o está críticamente herida, o si el costo financiero o emocional del tratamiento rebasa sus recursos, la eutanasia puede ser una opción válida.

Su Médico Veterinario entiende el enlace humano hacia los animales domésticos, puede examinar y evaluar la condición de su mascota, puede valorar sus oportunidades para la recuperación, y puede discutir su incapacidad potencial y los problemas a largo plazo. El o ella puede explicar opciones médicas y quirúrgicas y las posibles consecuencias. Porque su Médico Veterinario no puede tomar la decisión de la eutanasia por usted, es importante que usted entienda en detalle la condición de su mascota. Si cualquier parte del diagnóstico o las posibles consecuencias para el futuro de su mascota no le queda claro, pídale que repita la explicación de nuevo. Difícilmente la situación requerirá una decisión inmediata y normalmente usted tendrá algo de tiempo para revisar los hechos antes de tomar una decisión.

Una vez que la decisión de la eutanasia se ha tomado, usted puede hablar del cuidado de los restos del cuerpo de la mascota con su Médico Veterinario y su familia. Su Médico Veterinario puede proporcionar la información sobre el entierro, cremación, y otras alternativas.

¿Qué hacer si el animal está saludable?

La eutanasia podría ser necesaria si un animal se ha vuelto feroz, peligroso, o difícil de controlar. Un poco de conducta indeseable y anormal puede ser modificada, por eso es importante discutir estas situaciones con su Médico Veterinario.

Limitaciones económicas, emocionales, y de espacio o cambios en el estilo de vida también pueden causar que un dueño considere la eutanasia para su mascota. A veces es posible encontrar otro lugar de residencia para la mascota y esa opción debe seguirse antes de optar por la eutanasia. La eutanasia sólo debe ser considerada cuando no hay alternativas disponibles.

¿Cómo se lo digo a mi familia?

Los miembros de la familia normalmente ya son conscientes de los problemas de la mascota. Sin embargo, usted debe revisar con ellos la información que ha recibido de su Médico Veterinario. El cuidado de medicina veterinaria a largo plazo puede ser una carga que usted y su familia podrían ser incapaces de sobrevivir emocional o económicamente, y esto debe discutirse abierta y honestamente. Anime a los miembros familiares para que expresen sus pensamientos y sentimientos. Aun cuando usted ha llegado a una decisión, es importante que los miembros de la familia, sobre todo los niños, expresen sus pensamientos y sentimientos y estos sean tomados en cuenta.

Los niños tienen cariño especial por sus mascotas. Excluir o tratar de proteger a los niños del proceso de tomar esta decisión porque se piensa que ellos son demasiado jóvenes para entender, sólo puede complicar y prolongar su proceso aflictivo. Los niños respetan las respuestas sinceras, verdaderas, y simples. Si ellos son preparados adecuadamente, los niños pueden normalmente aceptar la muerte de una mascota.

¿Será sin dolor?

La eutanasia a menudo se lleva a cabo en las mascotas por medio de la inyección de una droga que induce a la muerte. Primero, su Médico Veterinario puede administrar un tranquilizante para relajar a la mascota. La inyección siguiente es la droga de la eutanasia, su mascota se pondrá de inmediato, profunda e irreversiblemente inconsciente. La muerte será rápida y sin dolor.

¿Cómo puedo decir el adiós?

El acto de decir el adiós es un paso importante para manejar los sentimientos naturales y saludables de pesar, dolor, y pérdida. Su animal doméstico es una parte importante de su vida y es natural el sentir que está perdiendo a un amigo o compañero, porque usted lo es.

Una vez que la decisión de la eutanasia ha sido hecha, usted y otros miembros familiares pueden querer decir el adiós a su mascota. Darle una última despedida a su mascota por la tarde en su a casa o una visita en el hospital puede ser apropiada para usted y su familia. También debe permitirse a miembros familiares que quieren estar solos con su mascota hacerlo. Las despedidas siempre son difíciles.

¿Cómo puedo yo enfrentar la pérdida?

Después de que su mascota se ha muerto, es natural y normal sentir aflicción y tristeza. Para algunas personas, pasar algún tiempo con la mascota después de la eutanasia es provechoso. El proceso de duelo incluye el aceptar la realidad de su pérdida, aceptar que la pérdida y los sentimientos que la acompañan son dolorosos, y el ajuste a su nueva vida que ya no incluye a su mascota. Al entender el proceso de sufrimiento, usted estará mejor preparado para arreglárselas en su pesar y así ayudará a otros en la familia que comparten esta pérdida.

Hay muchas fases de aflicción, pero no todos las experimentamos en la misma forma. El rechazo puede empezar cuando usted aprende por primera vez acerca de la gravedad de la enfermedad de su mascota o sus lesiones. A menudo, entre más súbita es la muerte, es más difícil aceptar la pérdida.

El enojo y culpa siguen a menudo al rechazo. Su enojo normalmente puede dirigirse hacia las personas que usted ama y respeta, incluyendo a su familia y a su Médico Veterinario. Las personas que enfrentan con la muerte de su mascota dirán a menudo cosas que ellos realmente no quieren decir, hiriendo aquéllos a quienes ellos no quieren herir. Usted puede culparse o culpar a otros por no reconocer la enfermedad más temprano, por no hacer algo más pronto, por no poder permitirse el lujo de otro tipo de tratamiento extenso, o por ser descuidado permitiendo el daño al animal.

Usted también puede sentirse deprimido. Las lágrimas se derraman, hay nudos en su estómago, y usted tiene la percepción que ha agotado toda su energía. Las tareas diarias pueden parecer imposibles de realizar. A veces usted puede preguntarse incluso si usted puede seguir su vida sin su mascota. La respuesta es sí, pero hay tiempos cuando la ayuda especializada puede ser útil para tratar con su pérdida.

Una vez que usted y su familia aceptan la situación de sus sentimientos, usted puede empezar a solucionar y aceptar la muerte de su mascota. Cuando usted ha alcanzado la resolución y aceptación, los sentimientos de rechazo, enojo, culpa, y depresión pueden reaparecer. Si esto pasa, estos sentimientos normalmente serán menos intensos, y con el tiempo se reemplazarán con los recuerdos cariñosos.

Aunque las fases de pesar se aplican en forma general, la aflicción es siempre un proceso personal. Aunque algunas personas tomen mucho más tiempo que otras solucionando las condiciones como rechazo, enojo, culpa, y depresión, cada pérdida es diferente. Si usted entiende que éstas son las reacciones normales, usted estará mejor preparado para arreglárselas con sus propios sentimientos y para ayudar a otros a enfrentar los suyos. A los miembros familiares se les debe volver a asegurar que la pena y la aflicción son las respuestas normales y naturales a la muerte.

Ellos no pueden entender

La familia a veces bien-intencionada y amigos no pueden darse cuenta de que tan importante era su animal doméstico para usted o la intensidad de su pesar. Comentarios que ellos hacen pueden parecer crueles y sin cariño. Sea honesto con usted y con otros sobre cómo se siente. Si la desesperación aumenta, hable con alguien que quiera escuchar sus sentimientos sobre la pérdida de su mascota. Hable sobre su pena, pero también acerca de los tiempos divertidos que usted y su mascota pasaron juntos, las actividades que usted disfrutó, y los recuerdos que son significativos.

Yo no puedo olvidarme

Si usted o un miembro familiar tienen la gran dificultad de aceptar la muerte de su mascota y no pueden resolver los sentimientos de aflicción y de tristeza, usted puede platicar estos sentimientos con un profesional especializado que entienda el proceso de duelo, como un especialista en depresión, clérigo, asistente social, médico, o psicólogo. Su Médico Veterinario entiende ciertamente el enlace que usted ha tenido con su mascota la cual ha perdido y puede recomendarle algunos de los recursos en la comunidad, como un grupo de apoyo o líneas telefónicas de consulta.

¿Debo conseguir otra mascota?

La muerte de una mascota puede perturbarlo emocionalmente, sobre todo cuando está implicada la eutanasia. Algunas personas pueden creer que ellos nunca querrán a otro animal. Para otros, una nueva mascota puede ayudarles a recuperarse más rápidamente de su pérdida. Así como el pesar es una experiencia personal, la decisión de cuando, si alguna vez, traer una nueva mascota a su casa también es un aspecto personal. Si un miembro de la familia está teniendo dificultad para aceptar la muerte de la mascota, conseguir un nuevo animal antes que esa persona haya resuelto su duelo puede insinuar que la vida de su mascota era indigna del pesar que todavía está experimentando. Los miembros familiares deben estar de acuerdo con el momento adecuado para adquirir una nueva mascota. Aunque usted nunca puede reemplazar a la mascota que perdió, usted puede obtener otra para compartir su vida.

Recordando a su mascota

El período del nacimiento a la vejez es mucho más corto para las mascotas que para las personas. La muerte es parte del ciclo de vida. No puede evitarse, pero el entendimiento y la compasión pueden ayudarle, a su familia, y a sus amigos para manejar el pesar asociado con esta. Intente recordar y apreciar mucho los tiempos buenos que usted compartió con su mascota. Usted también puede hacer un monumento conmemorativo de algún tipo o contribuir a una caridad en honor a su mascota.