Respaldo de material de tanatología

Goethe. Aforismos.

De: irichc  (Mensaje original) Enviado: 21/04/2004 18:31

La primera y última cosa que el genio necesita es amor a la verdad.

Compadezco a los hombres que se preocupan sólo por lo transitorio de las cosas y que se extravían en el estudio de lo perecedero, puesto que estamos aquí por un pequeño instante deberíamos hacer lo perecedero imperecedero en la medida de nuestras fuerzas.

El filósofo comete un gran error cuando pregunta por la causa y el efecto. Ambos constituyen el fenómeno indivisible.

Nadie mira al arco iris durante más de quince minutos.

Todo hombre cree en su juventud que el mundo empezó con él y que todo existe por mor de sí mismo.

No nos engañan: nos engañamos.

Estar satisfecho con los propios límites es un estado lamentable.

El amor y el deseo son las alas del espíritu para las grandes hazañas.

La hazaña lo es todo, la gloria no es nada.

Nadie está más definitivamente esclavizado que aquellos que falsamente creen ser libres.

Si quieres crear algo, has de ser algo.

El que no avanza, retrocede.

¡Feliz el hombre que conoce el gran abismo entre su deseo y su poder! Tan equivocado resulta sobrevalorarse como subestimarse.

Las virtudes y los vicios nacen de una misma raíz.

La ausencia de tentación es ausencia de virtud.

Cuando elogias a alguien le estás llamando tu igual.

El hombre no ha nacido para resolver el problema del universo, sino para averiguar qué ha de hacer y para regirse según los límites de su comprensión.

Lo que no entendemos, no lo poseemos.

Sólo conocemos con precisión cuando sabemos poco; con el conocimiento se incrementa la duda.

Estamos acostumbrados a ver cómo los hombres apartan lo que no entienden, y se extrañan ante lo bueno y lo bello porque no está al alcance de su interés.

El comienzo de la fe es el comienzo de la fertilidad; pero el comienzo de la descreencia, aunque brille, está vacío.

….

La belleza es la manifestación de leyes naturales secretas que, de otro modo, habrían permanecido eternamente ocultas.

El mayor problema de cualquier arte es causar por la apariencia la ilusión de una realidad más elevada.

La felicidad es una pelota tras la que corremos mientras rueda y a la que pisamos cuando se detiene.

Será grande y feliz el que no necesite ni mandar ni obedecer a fin de asegurar para sí alguna importancia en el mundo.

La palabra de un hombre no es la palabra del hombre.

El que no puede amar tendrá que aprender a halagar.

La vida es la infancia de nuestra inmortalidad.

El progreso no ha seguido una línea recta, sino una espiral con intervalos de progreso y retroceso, de evolución y disolución.

La muerte es el encuentro de la eternidad con el tiempo.

Dios es la existencia!

De todos los ladrones los tontos son los peores; te roban el tiempo y la paciencia.

Nada es más indignante que la mayoría; porque ésta consiste en unos pocos cabecillas vigorosos, en bellacos que buscan acomodarse, en el débil pueblo que los asimila, y en la masa que se arremolina en torno a ellos sin saber al fin y al cabo lo que quiere.

Todo lo bueno e inteligente se encuentra en una minoría.

Goethe. Aforismos.