Respaldo de material de tanatología

Bioética. Células Madre.

Bioética. Células Madre.
Zarina Moderador  Enviando en: viernes, 06 de junio, 2003 – 07:17 pm

Las células Madres o stem cells, son unas células que tienen la virtud natural de poderse convertir en cualquiera de las 220 variedades celulares que integran nuestro organismo.

Desde hace unas décadas, los científicos saben que estas células transformistas abundan en la medula ósea, es decir, el tejido ubicado en el interior de los huesos que se encarga de fabricar las células sanguíneas.

Estas células pueden incluso curar hasta un infarto en el corazón.

En los últimos 18 meses, las células madre se han erigido en las indiscutibles estrellas de los laboratorios de biomedicina.

Sin duda alguna éstos y otros trabajos aportan un rayo de esperanza para quienes sufren enfermedades hoy por hoy incurables, por ejemplo, la inyección de stem cells en el hígado podrían producir nuevos hepatocitos y así rejuvenecer los órganos afectados por la cirrosis y la hepatitis.

La terapia celular seria de utilidad para curar la osteoartritis y la artritis reumatoide, mediante la sustitución del cartílago dañado, así como para fabricar retazos de piel para el tratamiento de los grandes quemados.

El cultivo de células pancreáticas, concretamente las productoras de insulina en el páncreas, acabarían con la diabetes, Y como ya se ha adelantado las células madre, podrían ser forzadas a metamorfosearse en cardiomiocitos, con el fin de revertir ciertas dolencias cardiacas, o en distintas estirpes de células nerviosas, para atacar eficazmente las lesiones medulares, el Alzheimer, el Parkinson, la esclerosis y otros terribles trastornos neurodegenerativos.

Incluso las mentes mas osadas vaticinan que las stem cells, servirán en un futuro próximo para crear bancos de órganos en los que crecerán riñones, corazones, hígados y otras partes del cuerpo destinadas a trasplantes.

Los sorprendentes avances en el campo de las células madre vienen salpicados por una agria polémica que enfrenta a científicos, moralistas, políticos y otros sectores sociales, la controversia reside en el método de obtención, ya que las stem cells se hallan en los embriones muy jóvenes.

Ya que su capacidad transformista surge en el mismo zigoto, que es el huevo recién fecundado ya que es en ese momento que puede originar cualquier estirpe celular, en las primeras horas de la fertilizacion.

No es de extrañar que el embrión humano acapare las miradas de los investigadores que trabajan con células madre.

Es en este punto donde los intereses puramente científicos entran en conflicto con los dilemas éticos que plantea el uso de material embrionario en investigación.

Este puede tener tres procedencias: los embriones sobrantes de los métodos de reproducción asistida, los blastocitos engendrados ex profeso como fuente de stem cells, y los embriones de procedentes de técnicas de clonación, esta última opción , aun en fase muy precoz.

El embrión clónico se pude fabricar a partir de la fusión de una célula extraída de un individuo adulto con un óvulo al que se le ha retirado el núcleo.

Independientemente de su origen, para unos, un joven embrión humano, con menos de 14 días no es mas que un amasijo celular; para otros es una vida que hay que proteger, incluso cuando su destrucción sirva para obtener las células madre que en potencia pueden salvar millones de vida.

Son posturas diametralmente opuestas que plantean serios interrogantes bioéticos.

A este respecto, como en otros campos novedosos de la ciencia actual., en México no hay legislación. Sin embargo un grupo de científicos ha sugerido al gobierno de Fox para que ponga manos a la obra en una normatividad para este tipo de investigación y se ha pronunciado a favor de la clonación para obtener células madre.
En Gran Bretaña, desde hace aproximadamente un año sus científicos pueden clonar embriones humanos con fines terapéuticos.

Bush, dio su apoyo limitado a los ensayos con stem cells.

La Iglesia Católica, en particular Juan Pablo II, quien desde hace años sufre la enfermedad de Parkinson, ha manifestado que las células embrionarias son una forma de vida humana y que por tanto, hay que proteger a toda costa.

Del mismo modo piensan los puristas provida, que hacen hincapié en que existen otras fuentes de células madre, como la medula ósea, la placenta y la grasa procedente de las liposucciones.

Este es un problema que tambien estudia y trata la Bioetica, rama integral de la Tanatologia.

Saludos.