Respaldo de material de tanatología

Bioética. Clonación y Religión.

Bioética. Clonación y Religión.

Zarina Moderador  Enviando en: viernes, 06 de junio, 2003 – 07:32 pm

Con frecuencia se cree que la fe y la ciencia son fuerzas opuestas, luchando para prevalecer una sobre otra. En realidad, la religión es una guía para vivir, mientras que la ciencia es una herramienta que nos muestra el esplendor de esa misma Creación, y que nos permite mejorar nuestras vidas de acuerdo a nuestra fe. Como herramienta, la ciencia, nos corresponde a todos decidir cómo usarla.

Como toda herramienta puede ser usada para beneficio de la humanidad, pero también, puede prestarse para abusos.

Por medio de la ciencia se ha logrado aumentar la producción de alimentos, las telecomunicaciones mantienen al mundo relativamente unido, y muchas enfermedades que antes no se podían combatir se curan con facilidad hoy en día.

La ciencia sirve como contrapeso para los excesos de algunas sociedades que pueden producir daños por interpretaciones religiosas retorcidas y exageradas, como en los casos de las persecuciones de brujas en la edad media.
Sin embargo, también es la ciencia la que ha permitido el desarrollo de armas nucleares, que mantienen al mundo en una especie de equilibrio basado en el terror, e incluso muchas veces nos niegan una visión humana del mundo.

La emoción del descubrimiento es una de las sensaciones que el científico más disfruta, pero no se puede dejar a un lado las implicaciones de lo que deseamos descubrir.

Recientemente las investigaciones en genética y clonación han presentado una nueva razón para que la ciencia y la religión se enfrenten.

El tema en sí no es nuevo, como lo pueden atestiguar las controversias que se originaron a partir de la inseminación artificial y los bebés de probeta.

En el caso de la clonación ya no se trata de la fecundación de un óvulo por un espermatozoide en un medio no natural, sino del desarrollo de una criatura a partir de una sola persona.

¿Está preparada la humanidad para lidiar con las implicaciones morales, legales o espirituales de la investigación en clonación?

Esta es una pregunta que no ha podido ser respondida adecuadamente, por lo que la duda permanece. Es por esto que se debe proceder con cautela en este asunto.

Los datos científicos no deben ser la única razón para proseguir la investigación. La ciencia es una actividad humana y por lo tanto no puede desligarse de las implicaciones sociales.

Consideremos las posibilidades. Si se lograra hacer crecer órganos aislados en un laboratorio, muchas personas podrían ser tratadas de los males que lo aquejan. Podríamos tener corazones, hígados y otros órganos preparados para remplazar los que se han dañado dentro de personas enfermas.

El estudio podría aportar también nuevas formas de tratamiento más apropiadas para muchas enfermedades que son actualmente incurables. ¿Tenemos el derecho de negarle a alguen la posibilidad de tener un poco tiempo más de vida y con menos dolor?

Por otra parte, debemos pensar que, en la historia de la humanidad, siempre se han explotado a muchos grupos humanos basándose en diferencias superficiales, como el color de la piel, el género, el idioma o la religión (discriminaciones que fueron con frecuencia justificadas con “estudios científicos”).

Si algún día, por medio de los avances científicos, se pueden eliminar problemas genéticos entre los futuros individuos, debemos asegurarnos que quienes sufres de discapacidades no sean discriminados. De hecho, en Estados Unidos, ya a varias personas se les ha negado un seguro de vida después de que las empresas aseguradoras realizaran estudios en este sentido.

La clonación abre muchas posibilidades para aliviar el sufrimiento humano, pero también presenta graves peligros. Por ejemplo, no sería moralmente aceptable experimentar o descartar embriones humanos en la investigación. Ningún ser debería ser clonado para servir un propósito, como si se tuviera una fábrica de soldados, músicos o sirvientes.

Muchas personas dudan si se debe considerar la clonacion como una muestra de la inteligencia que nos fue entregada o si es una manera de jugar a ser dioses nosotros mismos, dejándonos llevar por nuestro orgullo.

Si continúa la investigación en genética y clonación, todos los miembros de la sociedad debemos asegurarnos que sea para el beneficio de todos. Tenemos el derecho de escuchar, en un lenguage comprensible, sus ventajas y desventajas morales, científicas, legales y sociales. La ciencia nos da un gran poder, recordemos entonces que con el poder viene la responsabilidad.

La clonación es otra área llamada Bioética, parte tambien de la Tanatologia.

Saludos. 🙂