Respaldo de material de tanatología

Incidencia de la pérdida de hijos en la relación de pareja

Dark Crow
Feb 25 2008, 02:30 AM

Es de los pocos tanatologos que cubren el area de pareja en procesos de duelo. Hasta donde se es uno de los pocos especializados.

CITA
Incidencia de la p?rdida de hijos en la relaci?n de pareja

Por Carlos Juan Bianchi
Al iniciarse el duelo, vivencias confusas y negativas como la culpa, el resentimiento, la impotencia, la sensaci?n de ser incomprendidos por el medio familiar y social se hacen presentes en ambos padres.
Son adem?s estas emociones vividas de modo particular en cada uno de ellos, y a menudo no coincidentemente.
Frente a tales hechos el silencio, la incomunicaci?n, la hostilidad o los reproches, se instalan en la pareja que buscar? entonces resolver individualmente su duelo distanci?ndolos a?n m?s.
Probablemente un falso sentimiento de ?fidelidad? hacia el hijo ausente har? que disminuyan o se anulen las gratificaciones habituales de la pareja, ahondando as? el dolor y la tristeza. De este modo el distanciamiento entre los padres ser? evidente y el sinsentido del v?nculo comenzar? a instalarse en ellos.
Se apoyan en estos hechos las estad?sticas que hablan de un aumento de las separaciones en las parejas que han perdido hijos.(**)

Al detenernos en el an?lisis de este desarrollo, notamos que las caracter?sticas del v?nculo preexistente a la p?rdida cobran una incidencia fundamental en la evoluci?n de los hechos.
Los que con antelaci?n al duelo sobrellevaban una relaci?n conflictiva son los que dan raz?n a ?stas estad?sticas, ya que la p?rdida obra como detonante que pone en evidencia todo lo que hasta all? se negaba.
De todos modos la separaci?n podr?a evitarse si llegado a este punto ambos padres reconocen y asumen su propio conflicto, y recurriendo a una ayuda externa ( espiritual o terap?utica) evitan sumar al dolor del duelo la ruptura del v?nculo matrimonial.
En cambio, una pareja bien integrada compartir? su dolor, cada uno ser? para el otro el mejor interlocutor para su duelo, buscar?n juntos ayuda, esclarecimiento, consuelo, y unidos recorrer?n el dif?cil camino.
No habr? silencios, recordar?n al hijo a veces con una l?grima, otras con una sonrisa, y el v?nculo quedar? fortalecido por la experiencia compartida.

Algunas sugerencias finales para los padres que atraviesan ?ste tipo de situaciones son:

? Poder escuchar las demandas y requerimientos del otro.

? Identificarse con el sentir de su c?nyuge

? Romper los pactos de silencio con respecto al duelo.

Recordar al ausente cada vez que sientan necesidad de hacerlo, de manera intimista y sin la presencia de terceras personas que no siempre est?n dispuestas a participar de este tipo de reminiscencias.

? No postergar un di?logo por temor al conflicto.

? Incluir la tolerancia y las concesiones en la relaci?n.

? Rescatar los roles perdidos o empobrecidos dentro de la pareja.

Poniendo en pr?ctica ?stas sugerencias, tal vez logremos que las paralelas de la existencia individual en la pareja que enfrenta el duelo, puedan unirse para un compartido beneficio.

(*) Aunque referida a la muerte de su amada esposa, y no a la de un hijo, la siguiente estrofa en la que Macedonio Fern?ndez describe su honda pena, encierra con lucidez el sentimiento que embarga al ser humano ante una p?rdida irreparable;

( Amor se fue); mientras dur?

de todo hizo placer,

cuando se fue,

nada dej? que no doliera.

(**) He conocido, sin embargo, varios casos en que la pareja de padres se hab?a separado con bastante antelaci?n al doloroso suceso de la p?rdida de un hijo, y el hecho de sentirse unidos en el dolor los ha acercado nuevamente a reiniciar la vida en pareja.

Carlos Juan Bianchi

M?dico psiquiatra y psicoterapeuta. Tras la muerte repentina de uno de sus hijos en 1990 ha centrado su labor profesional en torno a la terapia de pareja y la elaboraci?n de los duelos motivados por p?rdidas significativas.
Autor del libro “El proceso del duelo” (Editorial Corregidor, Buenos Aires, 2003).